¿Cuál café tiene más cafeína espresso o americano?

La ciencia detrás de la extracción de cafeína

Para entender la diferencia de cafeína entre un espresso y un americano, primero hay que comprender cómo se extrae. La cafeína es un compuesto soluble en agua. Su extracción depende de varios factores: el tiempo de contacto del café con el agua, la temperatura del agua, el grado de molienda y el tipo de grano. El espresso se prepara forzando agua caliente a alta presión a través de café finamente molido durante un corto periodo de tiempo, generalmente entre 25 y 30 segundos. Esta técnica de extracción rápida es muy eficiente, extrayendo una alta concentración de compuestos, incluida la cafeína. Por el contrario, un café americano, que es simplemente un espresso diluido con agua caliente, no añade cafeína, solo volumen. La clave está en la concentración y el volumen final de la bebida.

El mito del "chupito de cafeína"

Aunque el espresso tiene una concentración de cafeína por mililitro mucho mayor que cualquier otra preparación, su volumen total es minúsculo (unos 30 ml). Esto significa que, si bien cada sorbo es potente, el contenido total de cafeína de una sola taza de espresso no es tan elevado como se podría pensar. La concentración es engañosa, y el volumen final es el factor determinante.

Espresso: ¿una bomba concentrada o un espejismo?

Un solo shot de espresso (aproximadamente 30 ml) contiene entre 60 y 80 mg de cafeína. Esta cantidad varía según el tipo de café, el tueste y la técnica del barista. Lo que lo hace sentir tan potente es la velocidad con la que se consume y su alta concentración. El sabor intenso y la crema densa que lo caracteriza nos dan la sensación de estar bebiendo una bebida extremadamente energizante. Sin embargo, su bajo volumen hace que la ingesta total de cafeína sea moderada. Si buscas una cafetera para un espresso perfecto, los modelos de bomba de presión son la mejor opción, ya que replican el proceso de las cafeteras profesionales, asegurando la presión ideal para una extracción óptima.

¿Cuáles son las mejores cafeteras para espresso?

• Cafeteras automáticas: Ideales para quienes buscan comodidad y un espresso de calidad con solo pulsar un botón. Marcas como De'Longhi o Siemens son muy populares.
• Cafeteras manuales: Perfectas para puristas que disfrutan del control total sobre la molienda, el tampado y la extracción. La marca Rancilio es una referencia en este sector.
• Cafeteras de cápsulas: Ofrecen la máxima sencillez. Aunque el control es mínimo, garantizan un resultado consistente y rápido. Bosch, con su sistema TASSIMO, es una excelente opción.

Americano: el gigante silencioso de la cafeína

Un café americano, como su nombre indica, es una adaptación del espresso. Consiste en uno o dos shots de espresso a los que se les añade agua caliente. Si un americano se prepara con un solo shot de espresso, su contenido de cafeína será el mismo que el del espresso (60-80 mg). Sin embargo, si se prepara con dos shots (un "doble americano"), la cafeína total se duplicará, alcanzando entre 120 y 160 mg. Por su mayor volumen (entre 120 y 240 ml), un americano es ideal para quienes disfrutan de beber café durante más tiempo. El americano, por lo tanto, a menudo tiene más cafeína total que un espresso individual, especialmente si se usan dos shots. Este es un punto clave para quienes buscan un mayor subidón de energía a lo largo del tiempo.

Comparativa directa: el veredicto final

La respuesta a la pregunta "¿cuál café tiene más cafeína?" no es tan simple como parece. Depende de cómo se mida.

• Por concentración (mg/ml): El espresso gana de forma abrumadora. Un mililitro de espresso tiene mucha más cafeína que un mililitro de café americano.
• Por taza o porción total: Aquí la situación se invierte. Un café americano estándar, especialmente si se prepara con un doble espresso, tiene un contenido de cafeína total superior al de un solo espresso.

En resumen, si buscas un golpe de energía rápido y concentrado, el espresso es tu mejor aliado. Si prefieres una bebida para saborear lentamente y con un mayor contenido total de cafeína, el americano es la elección más lógica. La clave es entender que el volumen de la bebida es el factor más importante para determinar la cantidad final de cafeína que consumes.

Errores comunes al preparar tu café en casa

Preparar un buen café en casa es un arte, pero a menudo cometemos errores que afectan el sabor y la potencia de nuestra bebida.

• Molienda incorrecta: Para espresso, la molienda debe ser muy fina. Si es demasiado gruesa, la extracción será deficiente y el café saldrá aguado. Si es muy fina, el agua no pasará correctamente, resultando en un sabor amargo.
• Agua a temperatura incorrecta: El agua debe estar entre 90 y 96°C. Si está demasiado fría, la extracción de cafeína y sabor será incompleta. Si está demasiado caliente, el café se "quemará", liberando sabores amargos.
• No limpiar la cafetera: Los aceites de café se acumulan y se vuelven rancios. Una cafetera sucia alterará drásticamente el sabor de tu café, sin importar la calidad del grano.
• No medir las proporciones: La proporción ideal para un espresso es de 1:2. Es decir, por cada gramo de café, obtendrás 2 ml de espresso. Usar demasiada o muy poca agua afectará la concentración y, por tanto, el contenido de cafeína.